Recuerdo mi niñez rodeada de cuentos, casitas de muñecas y muchos muchos peluches.
Era una niña muy feliz y a la vez muy inocente, creía en la magia como nadie y eso hacía que viviera todo con mucha más ilusión.
Me pasaba horas y horas jugando con mis barbies sin necesitar nada más, solo mi imaginación y un suelo fresquito ;)
Me pasé muchos años pidiendo a mis padres un hermanito como regalo y por fin me lo concedieron, era para mi como un juguete: lo vestía, peinaba y inventábamos historias juntos.
Amante de los Teletubies, las películas Disney y los instrumentos viví una infancia muy bonita rodeada siempre de mi familia.
Recuerdo los primeros 5-7 años con un gran amor, era todo enorme para mi, cada día descubría mundos nuevos, me reía hasta caer dormida de cansancio, pintaba, corría por toda la casa y me sentía como una princesa en mi reino.
Era muy coqueta y me encantaba que mi madre me pusiese muy guapa, adoraba el café a cucharadas, los gorritos, hacerme fotos cuando se me caían los dientes, las barras para dar volteretas...
No necesitaba de ningún aparato electrónico y me siento muy orgullosa de ello, no como los niños de hoy en día que con 7-8 años ya solo se divierten con ellos...
La niña de los ojos grandes que iba descubriendo poco a poco lo que era el mundo...