Me siento la "por si acaso", y la "ya no podemos estar contigo", la diferente, la rara o simplemente alguien humano.
Humana porque siento y me decepciono, lloro, estoy triste y me siento sola...
Sola aún en una ciudad gigante, con mucha gente a mi al rededor pero sola y con un sentimiento de añoranza muy latente en los últimos días.
Justo en esos instantes solo me apetece tocar el piano hasta que me duelan las manos y la cabeza, sentarme a pensar en mi cama mirando por la ventana y jugar con mi perra.
Quizás aislarme del mundo, buscar un refugio o un lugar donde pase lo que pase siempre pueda contar conmigo misma.
A veces... Irina siente y sufre, algo invisble para los demás, escondido tras su aparente felicidad de todos los días...
Pero por suerte solo a veces...
